Sánchez Haro alerta del posible impacto negativo del “auge de la extrema derecha y el euroescepticismo” en la futura PAC

El consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural en funciones, Rodrigo Sánchez Haro, ha alertado del riesgo que corre la Unión Europea (UE) y la Política Agrícola Común (PAC) “por el auge de los nacionalismos y la extrema derecha euroescéptica”, ya que “quieren menos Europa, planteando incluso la desaparición de la UE”. Al respecto, ha lamentado que se trata de “formaciones que desde el ataque a la libre circulación de mercancías y personas, y agitando el miedo a la inmigración, apuestan por la vuelta de los aranceles y a las fronteras para personas y mercancías”.

Sánchez Haro ha intervenido hoy en las jornadas ‘La PAC post 2020’ organizadas por el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas de Almería (Coitaal), donde ha pedido al público que se imagine el “efecto demoledor” que esto podría tener en un sector como el agroalimentario andaluz, en el que la exportación es “esencial” y el mercado europeo ejerce de “motor para la modernización y la innovación”. De hecho, las ventas de alimentos y bebidas de Andalucía a otros mercados de la Unión Europea representan el 75% de unas exportaciones regionales cuyo total ha rozado los 11.000 millones de euros en 2017 (25% del total de España). Almería, por su parte, se presenta como la principal provincia exportadora de hortalizas con más de 1.500 millones de euros en ventas de enero a septiembre de 2018 (35% del total nacional).

En su discurso, el consejero ha afirmado que el desarrollo de la agricultura andaluza y almeriense “no se entendería sin el impulso propiciado por nuestra inclusión en el Mercado Único de la Unión Europea (UE)” porque ésta “nos abre las puertas al resto de mercados mundiales”, que conocen y valoran el alto grado de exigencia de las normas de comercialización, seguridad y calidad alimentaria que cumplen sus miembros.

Además, la UE cuenta con una política “de importancia capital para Andalucía”, la Política Agrícola Común, que, en palabras del consejero, “ha sido y es fundamental para la conservación de la soberanía alimentaria, evitar la despoblación en nuestro medio rural e impulsar el desarrollo del tejido productivo, provocando además un efecto multiplicador en la economía”. Esta política comunitaria supone más de 1.700 millones de euros al año de fondos europeos para Andalucía, cantidad que supera los 400 millones de euros en Almería en esta legislatura.

Las jornadas del Coitaal de hoy han coincidido con la celebración del pleno de los demás colegios oficiales de ingenieros técnicos agrícolas de España, organizado en Almería con motivo del 40 aniversario de esta entidad andaluza. En referencia a esta ocupación, Sánchez Haro ha puesto en valor el papel de este “valioso colectivo profesional” que es un “eslabón fundamental en la transferencia de conocimientos y tecnología a nuestro campo”. “Garantizáis calidad, seguridad y sostenibilidad, consiguiendo que nuestra agricultura sea todo un referente en los mercados nacionales e internacionales”, ha resaltado el consejero.

Nueva PAC

Rodrigo Sánchez ha recordado que actualmente se están negociando los Reglamentos de la PAC y el nuevo marco presupuestario para el futuro período 2021-2027. De hecho, el consejero ha comentado que el Parlamento está acelerando los debates con el objetivo de poder aprobar el nuevo marco financiero plurianual antes de las futuras elecciones en mayo de 2019, ya que existe una alta preocupación de que los partidos euroescépticos de ultraderecha aumenten su representación y “su apoyo a la no-Europa” suponga una reducción del presupuesto.

El consejero ha ratificado que “todo el sector agrario de Andalucía nos oponemos frontalmente” a un posible recorte del presupuesto de la futura PAC y ha recalcado que esta región “ha hecho sus deberes”, logrando “aunar esfuerzos y alcanzar el consenso” para defender una política europea “más fuerte y más justa para Andalucía”. Esta unidad se materializó en una declaración institucional que contó con el apoyo de todas las Organizaciones Profesionales Agrarias, las cooperativas y los partidos políticos representados en el Parlamento andaluz. Rodrigo Sánchez ha apuntado que el Gobierno de Andalucía se ha empleado “a fondo” para sellar alianzas con otras regiones nacionales y de la Unión Europea con el fin de alcanzar objetivos comunes, una unión plasmada en el documento presentado en Estrasburgo junto a Castilla y León, Extremadura y otras ocho regiones europeas.

“Pero este esfuerzo puede quedar en nada si las fuerzas euroescépticas y ultranacionalistas de extrema derecha consiguen aumentar su representación en el Parlamento y provocan reducciones en el presupuesto comunitario o un bloqueo en la UE”, ha lamentado.

Posicionamiento andaluz

En cuanto a este debate sobre el futuro de la Política Agrícola Común, el consejero de Agricultura ha explicado que el Gobierno andaluz coincide con la comisión en su intención de promover “un sector competitivo, sostenible, moderno, inteligente y resiliente”. Sin embargo, desde la Consejería se echan en falta también algunos objetivos que consideran “básicos”, como empoderar a la mujer en el sector agrario y el relevo generacional”

“Entre todos debemos cerrar filas y consensuar posturas de base de cara a esta negociación de manera que la PAC deje de ser una política en regresión”, ha apuntado Rodrigo Sánchez, que ha añadido que también hay que “evitar cualquier posibilidad de renacionalización como proponen los nacionalistas euroescépticos de la extrema derecha”. Para el consejero andaluz es “fundamental” preservar el modelo europeo de agricultura basado en un medio rural con pueblos vivos y una aportación fundamental de las explotaciones familiares, en las que debe centrarse el apoyo a la renta de la política comunitaria. Se trata de un modelo de explotación gestionada por personas que viven en el medio rural, que apuesta por la innovación y que “cuenta con la colaboración del trabajo externo, también de los inmigrantes, que aportan una colaboración e integración esencial como bien conocemos aquí”, ha afirmado Sánchez Haro.

Asimismo, desde la Junta de Andalucía se apoya también una distribución más equitativa entre beneficiarios aplicando límites máximos (capping) y porcentajes de reducción en los tramos altos (degresividad); el mantenimiento de las ayudas a las Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas (OPFH) y que las subvenciones se destinen a las personas que ejerzan la actividad agraria.