El trigo y el girasol tendrán futuro en Andalucía si el sector marca una estrategia de diferenciación que les separe de sus competidores

En su XXXIV Jornada de Cultivos Herbáceos, ASAJA-Sevilla ha logrado reunir en una mesa abierta al público a un selecto grupo de expertos que han ofrecido  respuesta a las muchas preguntas que, ante la falta de rentabilidad de los cultivos herbáceos tradicionales (trigo y girasol), vienen planteándose en las últimas campañas muchos agricultores de la provincia de Sevilla que, en muchos casos, han optado por aparcar el trigo y el girasol para plantar cultivos arbóreos como el olivar o el almendro, más rentables en este momento; y en otros casos, están optando por abrir el abanico y buscar alternativas a las rotaciones tradicionales de trigo-girasol.

La Jornada fue inaugurada por el delegado provincial de Agricultura, Segundo Benítez, y por el  presidente de ASAJA-Sevilla, Ricardo Serra, y contó con el patrocinio de la Fundación Caja Rural del Sur y con la colaboración de Euralis, Cocereales, Agrovegetal y ASEGASA.

La provincia de Sevilla cuenta con la mitad de las 600.000 hectáreas de trigo y de girasol que se cultivan en Andalucía. Se trata de dos cultivos básicos en la campiña sevillana que, hoy por hoy, y pese a la reducción de superficie que ha experimentado el cultivo del girasol, sigue siendo la primera provincia productora de España, tanto de girasol como de trigo duro.   

Tras el análisis del sector de los cereales y las oleaginosas a nivel nacional e internacional, se abrió una mesa redonda, moderada por el responsable de la sectorial de cereales de ASAJA-Sevilla,  José Vázquez, en la que intervinieron el director de Agrovegetal S.A., Ignacio Solís, el responsable de compras de Agropro Grupo Sovena, José Suárez, el director gerente de Cocereales, Arturo Hidalgo, el técnico del IFAPA, Alejandro Castilla, el director técnico de Euralis Semillas, José Antonio García de Tejada, el responsable de ventas de la sección Cereal de Manzanilla Olive S.C.A. , José Manuel Rodríguez, y el responsable de compras de Northstar Brokerage, Pedro Villa.

Andalucía pierde 120.000 hectáreas de girasol

El déficit de lluvias de las cuatro últimas campañas, la falta de tratamientos insecticidas, los escasos incentivos a la calidad diferenciada, que en España está mal remunerada al contrario de lo que sucede en otros países, y los bajos precios del girasol y del trigo, especialmente del trigo blando, fueron elementos de queja de los agricultores, por lo que las respuestas a estas cuestiones coparon gran parte de las intervenciones.