ASAJA-Jaén valora que se use el pastoreo para evitar los incendios
ASAJA-Jaén aplaude que la Junta de Andalucía haga uso del pastoreo para evitar los incendios en las zonas forestales. Sin embargo, critica que, al mismo tiempo que apuesta por la actividad ganadera, trabaja para descatalogar las zonas de pastos en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas y darle una categoría de zonas arboladas. La organización recuerda que la ganadería y el pastoreo son un modo excelente de conservar el monte y el bosque, además de suponer una de las principales actividades económicas del parque. Insiste en que un monte habitado no arde y espera que la Administración deje las incongruencias y actúe de forma coherente con los pastos de Carzorla, Segura y Las Villas.
ASAJA-Jaén valora la iniciativa de la Junta de Andalucía a través de la Agencia de Medio Ambiente y el Plan Infoca de usar el pastoreo en las zonas forestales de la provincia para evitar los incendios. Recuerda la importancia de la ganadería en la prevención de los fuegos y hace hincapié en que “el mejor método para conservar el monte es el pastoreo”. Así, y pese a que con las más de 26.000 ovejas que comerán y pisarán la hierba de las sierras de Jaén durante este verano sólo se actuará en 1.500 de las 450.000 hectáreas forestales de la provincia, la organización espera que en años futuros se siga aumentando el número de pastores y ganado por los montes y bosques.
“Dicho esto, nos sorprende de forma espectacular que, al mismo tiempo que se fomenta el pastoreo, la Junta quiera descatalogar las zonas de pasto en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas y asemejarlas a la catalogación de zonas arboladas”, apunta Luis Carlos Valero, gerente y portavoz de ASAJA-Jaén. “Han decidido limitar la posibilidad de que la raza autóctona segureña, la que ha mantenido hasta hoy el parque tal y como lo conocemos, deje de hacer su labor de mantenimiento en la zona”. ASAJA-Jaén, miembro de la junta rectora del Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas lleva años intentando paralizar este cambio de catalogación, que se ha vuelto a recuperar con fuerza en los últimos meses. “Si eliminan la posibilidad de mantener estas zonas de pastos del parque, acaban con una importante actividad económica de la zona, al mismo tiempo que ponen a expensas del fuego esta joya de la naturaleza”, apunta. Hay que recordar, además, que este mantenimiento de los pastos es fundamental para que los propietarios de los terrenos puedan cobrar las ayudas PAC. A todo esto se suma la lucha que se mantiene a nivel andaluz para que se eleve la CAP o el Coeficiente de Admisibilidad de Pastos en Bruselas y de este modo la Ley de la Dehesa cobre virtualidad.
Luis Carlos Valero insiste en que la política forestal, pese a la profesionalidad de los efectivos del Infoca, “es un fracaso”. “No hay nada más que acordarse de cómo arden miles de hectáreas en nuestra provincia, como las más de 7.000 en cazorla en 2005 o las 13.000 del año pasado en Quesada y Larva”, apunta. “Sólo con operarios no se puede mantener el monte, y menos en provincias como la nuestra”, insiste. Recuerda que ASAJA-Jaén trabaja en un plan para la recuperación de la actividad en el monte a través de la silvicultura y pide que, en vez de perder el tiempo en catalogaciones absurdas, se trabaje para que un monte habitado de forma sostenible sea una fuente de empleo, riqueza y un seguro de conservación para futuras generaciones.