UPA Sevilla anuncia movilizaciones por unos precios justos para la aceituna de mesa

La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Sevilla (UPA Sevilla), se reunió ayer con los agricultores del sector de la aceituna de mesa. Estuvieron también presentes Miguel Cobos, secretario general de UPA Andalucía, y varios miembros de la recientemente nombrada Comisión Ejecutiva de UPA Sevilla: Verónica Romero, secretaria general; José Carlos Segura, secretario de organización; y Juan Francisco Bernabé, secretario ejecutivo.

Ante el inminente inicio de la próxima campaña de verdeo a principios de septiembre, la reunión ha tenido como prioridad abordar la preocupación por el precio de la aceituna de mesa. Y es que conviene recordar que este sector lleva enlazando muy bajas cotizaciones en origen en las cuatro últimas campañas, motivadas por una gran opacidad en la formación de los precios en la cadena, y los movimientos especulativos que llevan a cabo con gran impunidad la industria, la distribución y la comercialización. Así mismo, este encuentro ha servido para tratar otras problemáticas estructurales que también acusa el sector aceitunero.

Todos los inconvenientes que arrastra el sector, sumados a los bajos precios, vienen perpetuando una situación ruinosa para los productores porque, principalmente, no logran cubrir los costes de producción. Todas estas razones, llevaron a UPA, junto a los agricultores, a encabezar una serie de movilizaciones en Andalucía durante el verano de 2018. De estas se derivaron ciertos logros, como dar un impulso definitivo para la consecución de las I.G.P. para las variedades Gordal y Manzanilla sevillanas, gestión que llevaba mucho tiempo con los trámites iniciados, pero que había quedado en un cajón olvidada.

Pero lo más importante, que es el problema de la falta de precios justos, sigue siendo una quimera que aboca a los agricultores a una situación de falta de rentabilidad permanente. Por todo ello, UPA ha acordado con los productores de aceituna de mesa reiniciar las protestas llevando a cabo una movilización, que consistirá en una caravana de vehículos el próximo 21 de agosto en Sevilla. Partirá del “Benito Villamarín”, estadio del conjunto bético, y recorrerá la Avenida de la Palmera hasta el Palacio de San Telmo. Se espera la afluencia de unos 500 vehículos, y se aplicarán las medidas que contempla la ley para salvaguardar la salud de los asistentes y evitar posibles contagios por Covid-19. 

Y las reivindicaciones y exigencias que motivan y respaldan dicha movilización son las siguientes:

Que los agricultores perciban unos precios ligados a los costes de producción. Estos se sitúan actualmente en torno a 1 euro para el kilo de aceituna Manzanilla, y 1,20 euros para la Gordal, variedades que llevan aparejados altos costes productivos, pues su recolección se realiza a mano para no dañar el fruto. Por tanto, los productores no pueden seguir tolerando cobrar menos por su producto.

– Velar por el cumplimiento escrupuloso de la nueva Ley de Cadena Alimentaria, que obliga a la existencia de contratos entre productores y compradores, que fijen unos precios que cubran los costes de producción, e impedir la destrucción de valor del producto a lo largo de la cadena. Para asegurar que se cumple la ley, tanto UPA como el sector exigen a la AICA que realice inspecciones de oficio a la industria y en los puestos de compra, para vigilar que, efectivamente, los contratos referencian unos precios ligados a costes.

– Exigir a las distintas administraciones públicas la creación de un observatorio de costes de producción minucioso, así como el desarrollo de estudios oficiales de costes de producción por sector. En ellos ha de recogerse la conformación de los precios a lo largo de toda la cadena, incluido lo que le cuesta al agricultor producir, para que esto sirva de base jurídica y referencia para establecer unos precios en los contratos y permita la correcta aplicación de la nueva Ley de Cadena Alimentaria.

Intervención de las administraciones ante la imposición de cláusulas abusivas en los contratos por parte de las comercializadoras, aprovechando su posición de dominio.

– Puesta en marcha de medidas de autorregulación del sector a través de extensión de norma de las Interprofesionales, con carácter obligatorio para todos los productores que componen el sector. Que se permita la retirada de producción cuando las circunstancias del mercado lo requieran.

– Llevar a cabo programas de promoción en nuestro país y en el extranjero para impulsar el consumo de aceituna de mesa.

– Puesta en marcha de una línea de actuación o de ayudas para el sector de la aceituna de mesa, afectado por esta situación de crisis sanitaria por la Covid-19.

– Aplicación de medidas de tipo fiscal para ayudar a superar la crisis estructural que padece el sector, que además se está viendo agravada con la crisis sanitaria.

– Solicitar medidas de compensación económicas por parte de la UE para paliar el daño y las pérdidas que los aranceles de EEUU están provocando al sector.

– Impulso de una norma de calidad de la aceituna de mesa, ya que se trata de un producto con unos estándares de calidad. Esta norma contribuirá a la revalorización del producto y que no se banalice.

– La aceituna de mesa debe formar parte de los sectores susceptibles de percibir ayudas asociadas.

– Exigir la reducción de las importaciones por parte de los industriales y no permitir la comercialización de calibres bajos.

Vertebración del sector y fomento de la concentración de la oferta para ganar fuerza en la conformación de los precios.

Apuesta por la calidad, la innovación y la investigación.

Fuente: UPA Sevilla