La distribución mayorista suma ya 613 establecimientos, fundamentales para el suministro a los pueblos y al turismo

El 80 por ciento de las tiendas de alimentación que operan en régimen de franquicia o cooperativa se apoyan en la estructura logística de los mayoristas. Esta fórmula comercial ha demostrado su carácter esencial para servir a zonas rurales y, con la recuperación del turismo, se manifiesta también como un pilar fundamental para este sector.

La distribución mayorista afronta la última fase de la pandemia, definida por la práctica total recuperación de la normalidad, con una estructura reforzada tras haber demostrado su función esencial para el suministro de productos de primera necesidad en todo el territorio de España.

En la actualidad, la red de cash & carry suma 613 establecimientos, que representan una superficie comercial de más de 1,3 millón de metros cuadrados. De estas empresas, 491 pertenecen a compañías de ASEDAS, lo que supone el 74,7 por ciento de la superficie de autoservicios mayoristas y el 80 por ciento del número de establecimientos. Todos ellos se reparten por toda la geografía española, aunque con una especial presencia en Andalucía, los archipiélagos y zonas costeras del Mediterráneo y del Atlántico.*

La distribución mayorista de alimentación ofrece un servicio diferenciado que se extiende en tres áreas principales:

  • Tiendas franquiciadas, asociadas y pequeñas cadenas: el 80 por ciento de las tiendas de alimentación que operan en régimen de franquicia o cooperativa se apoyan en la estructura logística de los mayoristas para acceder a productos tanto frescos como secos. Este tipo de establecimientos están presentes de forma generalizada en las poblaciones por debajo de los 10.000 habitantes. Por lo tanto, la distribución mayorista es un baluarte para el suministro de productos de primera necesidad en la España rural.
  • Colectividades: que incluye desde colegios y universidades hasta comedores de empresa, hospitales, eventos o colectivos relacionados con las Fuerzas Armadas. El cierre del sector educativo afectó negativamente a la actividad de la distribución mayorista durante la pandemia, pero ésta ha seguido sirviendo al resto de colectividades y con la “normalidad recuperada” vuelve al cien por cien.
  • Sector turismo: que comprende no solo restauración y hotelería, sino también salas de fiesta, discotecas y cualquier establecimiento relacionado con el ocio. Un sector que espera recuperarse plenamente el próximo verano y para el que la distribución mayorista constituye una verdadera columna vertebral de servicio al sector.

A pesar de esta recuperación de la normalidad, la distribución mayorista no es ajena a la actual coyuntura definida especialmente por el enorme impacto de los altos costes de la energía, agravada por los problemas derivados de la guerra de Ucrania que impactan, a su vez, en otras materias primas. La fuerte competencia hace que, al igual que ocurre con la distribución minorista, los mayoristas estén haciendo también un gran esfuerzo por repercutir lo menos posible y lo más tarde posible esta situación al precio final, pero eso está afectando a sus márgenes, ya de por sí muy ajustados.

La distribución mayorista ha demostrado su función esencial durante los dos años pasados, como soporte del suministro de alimentos en las zonas rurales de España. Ahora, con la recuperación del turismo, también se manifiesta como un pilar para el desarrollo de uno de los sectores económicos más importantes del país, como es el turismo”, dijo Ignacio García Magarzo, director general de ASEDAS.

*Datos Retail Data a abril 2022. (www.retaildata.es)

Fuente: ASEDAS