Ecologistas en Acción: «La COP26 encara su recta final sin reconstruir la confianza entre el norte y el sur»

La crisis climática es un problema global. Los Estados deben sentarse juntos y escucharse. Entre los objetivos de la COP26 está reconstruir la confianza entre el Norte y el Sur global, lo que requiere que la cumbre sea capaz de dar una respuesta a las reducciones de gases de efecto invernadero, pero también de coordinar la respuesta internacional para afrontar la necesaria adaptación a las consecuencias que ya sufre el planeta tras siglos de continua quema de combustibles fósiles.

Del mismo modo, se deben garantizar mecanismos para afrontar los procesos de pérdidas y daños cuando esta adaptación no es posible. La adecuada financiación a todo ello no figura entre los resultados de la primera semana de la COP26, lo que hará muy difícil la recta final de la Cumbre de Clima. 

Así, mientras la ciudadanía se manifestaba en las calles, las negociaciones entre países intentaban acordar textos con menos opciones y, por tanto, más claros, que pudieran ser recogidos para debatirse en el tramo político de la COP26, que comienza esta semana. Este objetivo no se ha cumplido porque persisten los bloqueos que llevan produciéndose desde al menos 2018 en la cumbre de Katowice.

El debate sobre los tiempos de revisión de los compromisos a partir de 2025, recogido en el artículo 4, es el más avanzado, ya que existe un texto de negociación con nueve opciones a debatir. Siguen siendo más complejas las discusiones en torno al artículo 6. Este artículo define los mecanismos internacionales para que las empresas y Estados que hayan sido incapaces de realizar las reducciones necesarias puedan compensarlas a través de la inversión y la compra de derechos de emisión de gases de efecto invernadero a otras naciones que sí han cumplido los compromisos adquiridos.

Como refleja el documento final de las discusiones técnicas, la realidad es que el texto presentado no recoge ningún consenso de la comunidad internacional, ni tan siquiera las diferentes perspectivas de los países, por lo que es previsible que habrá grandes discusiones en torno a estos mecanismos. Estas discusiones pueden hacer imposible, de nuevo, alcanzar un acuerdo durante los últimos días de la COP26.

A juicio de Ecologistas en Acción, lo más preocupante es la falta de acuerdo entre los Estados sobre cómo proveer la financiación necesaria para hacer realidad los mecanismos de cooperación entre países, necesarios para que el Norte global afronte mínimamente su deuda histórica con muchos países del Sur global.

Queda pendiente aún la redacción de textos sobre la financiación de instrumentos como el Mecanismo de Varsovia y la Red de Santiago para las pérdidas y los daños, uno de los temas prioritarios que esta COP26 debería abordar de forma urgente. Las promesas escuchadas durante los primeros días de esta cumbre climática deben responderse con hechos, especialmente si la cumbre quiere restaurar esa confianza entre el Norte y el Sur global.

La falta de avances sobre la fijación de un nuevo objetivo de financiación para la adaptación o la incapacidad de completar los 100.000 millones de dólares para el Fondo Verde para el Clima siguen siendo enormes obstáculos para desbloquear estas negociaciones y obtener un resultado satisfactorio en Glasgow.

En uno de los plenarios finales de estos cuerpos técnicos se vio con claridad que persiste la negativa de muchos países a incorporar dentro de los documentos finales de estas cumbres del clima el pleno respeto de los derechos humanos. Las delegaciones mexicana y argentina señalaron con claridad que en la evaluación de los antiguos mecanismos del Protocolo de Kioto sigue sin incluirse esta mención, una propuesta a la que se sumaron numerosos países y también la Unión Europea. Estas declaraciones deberían mantenerse en todos los textos que quedan pendientes, especialmente en los referidos al artículo 6.

Quedan, por tanto, muchos temas de trabajo pendientes en la cumbre. El tiempo de la negociación se va agotando mientras persisten bloqueos que duran años. Para Ecologistas en Acción no es permisible seguir así: la insuficiencia de los objetivos y la incapacidad de los gobiernos para proveer la financiación necesaria, y establecer un mecanismo real para afrontar las pérdidas y los daños, es una gran amenaza para la puesta en marcha del insuficiente Acuerdo de París.

La organización ecologista señala que, en un mundo que está ya a más 1,1 ºC de temperatura por encima de la época industrial, existen millones de personas que están sufriendo las consecuencias de este calentamiento global. Apenas queda tiempo para actuar, los gobiernos son responsables de esta vulneración de derechos.

Ecologistas en Acción añade que hay que iniciar de forma inmediata un camino global para cambiar un sistema depredador de la vida por un sistema que actúe dentro de los límites del planeta, capaz de responder a la crisis climática, ocasionada por la falsa idea de un crecimiento ilimitado y la avaricia de empresas y gobiernos internacionales.

En la web:
https://www.ecologistasenaccion.org/183550

Fuente: Ecologistas en Acción