Andalucía cuenta ya con 104 Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas, que aglutinan a 20.000 agricultores

El consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Rodrigo Sánchez Haro, ha destacado en Almería el papel crucial que desempeñan las Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas (OPFH), alrededor de las cuales se organiza el sector «para crecer en fortaleza y competitividad». Sánchez Haro, que se ha reunido en El Ejido con una de estas entidades, la SAT Indasol, reconocida como OPFH desde 1997, ha recordado que la Junta de Andalucía «ha venido promoviendo que los agricultores del sector de frutas y hortalizas de Andalucía y de Almería se organicen en este tipo de entidades», de tal modo que en la actualidad son ya 104 las OPFH existentes en Andalucía integradas por más de 20.000 agricultores.

En el acto, en el que también ha intervenido la secretaria general de Fondos Europeos Agrarios de la Consejería, Concepción Cobo, se ha puesto de manifiesto que estas entidades andaluzas contarán en 2018 con 91 Programas Operativos, cada uno de los cuales tiene un Fondo Operativo con una financiación que aportan al 50% la  OPFH y los fondos europeos. En total, la inversión total es de casi 208 millones de euros, lo que supone que las ayudas se elevan a 104 millones.

El titular de Agricultura ha querido insistir en el caso de Almería, que concentra más del 50% de estos incentivos de manera que los 35 Programas Operativos presentados por las entidades almerienses supondrán una inversión de 116 millones de euros, apoyados desde la administración con 59,6 millones. Almería es la provincia también que cuenta con mayor número de OPFH, con un total de 41 que reúnen a más de 9.000 socios.

Sánchez Haro ha recalcado en torno a todos estos datos el hecho de que «muchos de los progresos de la agricultura almeriense han estado y están siendo apoyados por los Programas Operativos de las OPFH«, y en este sentido se ha referido a la adaptación de la producción a las demandas del mercado, la mejora de la comercialización y la apuesta por la sostenibilidad del sector, implantando la producción integrada y el control biológico y avanzando en producción ecológica». Además, ha recordado el consejero, «se ha hecho frente a situaciones de crisis de precios y se ha avanzado en innovación».

En último término, ha significado que estas ayudas en el futuro van a mejorar siguiendo las disposiciones del Reglamento Ómnibus, y ha anunciado que la propuesta de la nueva PAC para el período 2021-2027 introduce mejoras en relación con las actuales tendencias del mercado en materia de medio ambiente e innovación tecnológica y amplía la duración máxima de los programas operativos a siete años para proporcionar más estabilidad en sus inversiones a las OPFH.

Para concluir, el consejero ha señalado que, con todo esto, «hay razones de peso para la creación de Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas, defender el régimen de ayudas a los Programas Operativos de éstas y apoyar esta oportunidad para otros sectores agrarios para que puedan mejorar su competitividad y orientar sus producciones al mercado, como propone la Comisión Europea«.

El potencial de Almería

En la actualidad, en Almería, con 33.000 hectáreas de invernadero, se obtiene la mitad de la producción hortícola de Andalucía, en total tres millones de toneladas de hortalizas. Respecto de las exportaciones, esta provincia vendió más de dos millones y medio de toneladas por valor de más de 2.600 millones de euros en 2017. En los cuatro primeros meses del año 2018 estas exportaciones se han incrementado en un 5% respecto del mismo período del año anterior.

En lo que se refiere a la SAT Indasol que ha visitado el consejero de Agricultura, se trata de una entidad que en 2017 superó en su facturación los 102 millones de euros y que en las cinco últimas anualidades de fondos operativos ha realizado inversiones por valor de 31 millones de euros con una ayuda financiera total cercana a los 14,5 millones de euros.

Sánchez Haro marca la innovación como la “clave” de la eficiencia, el valor añadido y la rentabilidad del agro almeriense

El consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Rodrigo Sánchez Haro, ha  marcado la larga trayectoria del agro almeriense en el campo de la innovación como la “clave” de la eficiencia, el valor añadido y la rentabilidad que lo definen. Así lo ha destacado durante su intervención en una nueva cita del ciclo de encuentros empresariales Enclave Rural promovido por la entidad bancaria Unicaja, en este ocasión, en Almería. “Nuestra horticultura, fruto de años de trabajo, es expuesta en el mundo, a través de documentales como los que se emiten en los colegios alemanes, como modelo de buen hacer, una prueba de que estamos en el buen camino”, ha sentenciado el responsable autonómico.

Sánchez Haro ha reiterado, de este modo, el compromiso del departamento que dirige con la promoción de la inversión para que el sector se adapte a los “nuevos tiempos” y a las “nuevas soluciones” a través, por ejemplo, de incentivos a la modernización de explotaciones e industrias, el apoyo a la creación de Grupos Operativos de Innovación o el desarrollo de nuevas tecnologías. Todo, en palabras del consejero, para, “en definitiva, mejorar la competitividad y la excelencia de los productos agrarios y, con ello, la calidad de vida en nuestro medio rural”.

El titular de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural ha apuntado, en este sentido, la realidad, “que no podemos decir que sea el futuro, porque ya es presente”, de la digitalización de la cadena de valor y la bioeconomía. Ante estos retos, Rodrigo Sánchez ha asegurado que, “desde el Gobierno autonómico, dedicamos todo nuestro esfuerzo para que el sector agroalimentario andaluz se mantenga líder en producción y comercialización y, a la vez, respete el medio ambiente de hoy, para no poner en peligro los recursos de mañana”. Para el consejero, que no olvida la necesidad de luchar contra el cambio climático, “ya no vale crecer a cualquier precio”.

Rodrigo Sánchez, en este punto, además de los 1,5 millones de euros concedidos a varios Grupos Operativos de Innovación de Almería y los más de siete millones de euros destinados a la modernización de industrias agroalimentarias de la provincia, ha puesto de relieve la labor del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera de Andalucía (Ifapa), por ejemplo, desde el centro de La Mojonera. Desde este espacio de referencia se ejecutan, en estos momentos, 13 proyectos de investigación que buscan desde la transferencia de tecnología a la fruticultura mediterránea o el incremento de la eficiencia del agua, “recurso decisivo en Almería”, hasta iniciativas como Life-Climagri, sobre la adaptación de cultivos extensivos del Mediterráneo al cambio climático, o Innova-SAR, una herramienta para la toma de decisiones basada en la teledetección y modelización.

Herramientas tecnológicas

La Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, de igual modo, ha ofrecido al sector instrumentos como el Observatorio de Precios y Mercados, la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF) o el modelo de previsión de cosecha en hortícolas de invernaderos, que, presentada el pasado mes de marzo, supondrá una mayor garantía de acierto por parte del sector productor y comercializador, al favorecer la toma de decisiones desde una fase temprana. Andalucía, asimismo, lidera un partenariado europeo sobre Big Data y Trazabilidad en el sector agroalimentario, un “verdadero salto” hacia la modernización que, según ha continuado Sánchez Haro, recibirá este año el impulso de la convocatoria de otros 16 millones de euros para Grupos Operativos de Innovación, con una línea específica para la digitalización.

El otro desafío, la bioeconomía, es, desde la óptica del consejero, otro “mundo de oportunidades, de conocimiento y de negocio para las industrias y para la ciudadanía”. Con este fin, “para dar este paso más hacia la innovación y la diferenciación”, el Gobierno autonómico ha diseñado la Estrategia Andaluza para la Bioeconomía, actualmente en trámite de información pública. “Nuestra agricultura y nuestra agroindustria, sin duda, pueden contribuir de forma exitosa a este nuevo modelo económico basado en el uso eficiente del material biológico disponible”. No en vano, como ha señalado, existe un creciente interés por la obtención de bioproductos a partir de los restos vegetales y “la incorporación del principio de la economía circular (reducir, reutilizar y reciclar) refuerza la sostenibilidad de nuestras producciones y la diferenciación en el mercado”.

Rodrigo Sánchez no ha querido dejar atrás tampoco un asunto como el de los residuos plásticos. Ha recordado que Andalucía, “que ya fue pionera en la regulación de su tratamiento” y ante un contexto actual de vacío de normativa estatal que permita ordenar un sistema colectivo de gestión, “toma medidas”. Se han mantenido, ha explicado, reuniones con todas las partes implicadas para agilizar las autorizaciones de gestores de residuos y puntos de acopio, se han difundido trípticos informativos y se han limpiado los cauces de plásticos, con casi tres millones de euros en el último año.

Además, la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural lleva a cabo actuaciones, según  ha apostillado el titular del departamento, “para que la gestión de los residuos sea una oportunidad”, a través de la estrategia de restos vegetales ya en marcha. Bajo este paraguas, contempla ayudas para realizar autocompostaje y para el uso de rafia biodegradable y compost (nueve millones de euros convocados en la agroambiental de invernaderos), financia la compra de trituradoras o impulsa la creación de plantas de tratamiento de residuos, entre otras acciones. Todo ello en un escenario, ha finalizado, en el que hay ayuntamientos que aceleran las licencias para el centro de acopio (Níjar) o que asumen el coste de la gestión a través del punto limpio (Dalías).

Almería como modelo productivo

Con cerca de 33.000 hectáreas de invernadero y unas 12.000 hectáreas de cultivos al aire libre, Almería aporta más de la mitad de la producción hortícola de Andalucía sobre la base de la “máxima eficiencia” en el uso de los recursos. De hecho, como ha resaltado el consejero, “con un metro cúbico de agua los invernaderos de Almería generan unas 14 veces el valor de producción de las hortícolas al aire libre que existen en otras provincias”.

Los cultivos hortícolas aportan cerca del 20% del Producto Interior Bruto (PIB) de Almería y más de 100.000 empleos , por lo que representan un pilar fundamental para la economía de la provincia. En los primeros tres meses de 2018, el campo almeriense ha exportado más de 918.000 toneladas de frutas y hortalizas, un 4% más que en el mismo periodo de 2017, por valor de 974 millones de euros, un 15% menos en comparación con un ejercicio anterior marcado, desde la óptica de Sánchez Haro, por unas “excepcionales cotizaciones”, pero la segunda mejor cifra de los últimos 10 años.