El buque Miguel Oliver evaluará los recursos pesqueros y el medio marítimo del Golfo de Cádiz

El buque oceanográfico Miguel Oliver del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación comienza mañana una nueva edición de la campaña ARSA para la evaluación de los recursos pesqueros y la caracterización del medio marítimo del Golfo de Cádiz.

Durante 14 días se realizarán estudios para obtener datos de los índices de abundancia y patrones de distribución geográfica de las principales especies demersales (que habitan cerca del fondo marino) de interés pesquero en el área, así como de las características hidrográficas y sedimentológicas de la zona.

ARSA 1120 forma parte de las campañas de arrastre de fondo que se realizan en nuestro país y que son uno de los principales métodos de estudio directo de las poblaciones pesqueras explotadas. Con ellas se obtienen datos independientes de la actividad pesquera para la correcta gestión de las diferentes poblaciones de los caladeros.

La evaluación de los recursos pesqueros se realiza a partir de datos de índices de abundancia estratificados (estudios por áreas marinas con características homogéneas) de las principales especies comerciales, con sus distribuciones de tallas y datos biológicos, tanto de peces como de crustáceos y moluscos.

A lo largo de la campaña, que se enmarca dentro del proyecto PESCÁDIZ II  del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (CIEM), también se tomarán datos oceanográficos, así como datos de sedimento a través de un colector colocado en el arte de pesca para cada arrastre.

Las campañas oceanográfico-pesqueras en el Golfo de Cádiz se desarrollan de forma sistemática y en la actualidad están integradas en el Programa Nacional de Datos Básicos para la Gestión Sostenible de los Recursos del Mar, en el que la Secretaría General de Pesca sigue invirtiendo esfuerzos mediante, en este caso, el desarrollo de campañas de investigación a bordo de sus buques oceanográficos.

La información obtenida en esta campaña, en análisis conjunto con la serie histórica de la misma y con diferentes tipos de datos de la pesquería, será utilizada por los científicos en los correspondientes grupos de evaluación, de los que deben salir las recomendaciones para los gestores de la pesca. De esta manera, sector pesquero, científicos y administraciones pueden conseguir la explotación sostenible de las diferentes poblaciones.

UN BUQUE PUNTERO Y ECOLÓGICO

El Miguel Oliver forma, junto con el Vizconde de Eza y el Emma Bardán, la flota de barcos de investigación gestionada por la Secretaría General de Pesca. Con 70 metros de eslora y 12 de manga, cuenta con un equipamiento tecnológico puntero para la navegación y para la investigación pesquera y oceanográfica.

Está equipado con tres ecosondas, tres radares y seis laboratorios, además de un sofisticado sistema de posicionamiento y navegación. También está calificado como buque ecológico y silencioso por la sociedad de clasificación Bureau Veritas y cumple la normativa ICES 209 sobre emisión de ruidos y vibraciones en barcos de investigación.

Más información sobre las actividades de los buques de investigación pesquera y oceanográfica puede encontrarse en la web del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, dentro del apartado Pesca.

Fuente: Ministerio de Agricultura