La Fundación Savia pide soluciones a la quema del rastrojo del arroz

La Fundación Savia en una de sus últimas cartas al Presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, solicita una gestión adecuada de los rastrojos del arroz.

En la Comunidad Valenciana se han buscado alternativas más amables con el medio ambiente como es el embalado/empacado de los desechos, que son recogidos por empresas públicas; enterramiento, sin provocar fitopatologías; y quema, atendiendo a las condiciones meteorológicas de la zona a través de una app manejada por el propio agricultor. Con estas prácticas se optimiza el producto, optimizando la gestión, mejorando su rentabilidad, evitando residuos y generando valor añadido, empleando criterios de sostenibilidad y economía circular.

Andalucía cuenta con 33.000 has de arroz cultivadas. El manejo actual del rastrojo del arroz provoca graves problemas tanto en la salud como en el medio ambiente. Son necesarias medidas, debiendo ser establecidas vinculando a todos los agentes implicados, líneas de acción que mejoren la gestión y estableciendo protocolos especiales de alerta y vigilancia de la salud de las poblaciones afectadas.

La Fundación Savia se ha dirigido a la Consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, y al Presidente de la Junta de Andalucía sin obtener respuesta alguna hasta el momento.

La Fundación Savia había solicitado en sus cartas la constitución de una Mesa de Trabajo que incluyera a las Consejerías competentes en este sentido, junto a ayuntamientos, entidades agrarias y sociedad civil. El acuerdo de constitución de la Mesa de Trabajo se realizó en enero de 2020 con los responsables de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, pero todavía no han determinado las posibles soluciones a adoptar.

Las Plataformas ciudadanas de afectados creadas en los pueblos han mostrado unas muy buenas sensaciones, y dicen “salimos satisfechos de la reunión, la verdad que por parte de la Consejería todas las propuestas que nos mostraron fueron para erradicar el humo y utilizar la paja como biomasa. Por parte de los arroceros, también los vi comprometidos. Es lento pero creo que hemos dado un gran paso”.

La Fundación Savia, paralelamente, ha realizado una consulta a la Comisión Europea, en busca de una legislación que aborde bajo controles rigurosos la quema de los rastrojos de este cereal.

Fuente: Fundación Savia