UPA-A: «A pesar del almacenamiento privado y el descenso de la producción, el precio del aceite sigue por los suelos»

Con la campaña de olivar recién iniciada, UPA Andalucía retoma su seguimiento de la evolución de la campaña de aceite de oliva, a partir de los datos de octubre extraídos del último informe que acaba de publicar la AICA, sobre la evolución del mercado del aceite de oliva y el de aceituna de mesa.

Esta campaña de olivar viene marcada por una meteorología muy desfavorable a lo largo de todo el año, con precipitaciones muy escasas en invierno, una sequía agravada por las altas temperaturas del verano y la ausencia de lluvias, y un otoño que tampoco nos está descargando el agua necesaria. Además, tras una campaña 2018-19 récord en producción, es el turno de la vecería, con un aforo andaluz que ya estima un descenso del 32,7% en nuestra región. No obstante, la situación podría cambiar si las lluvias hacen acto de presencia en las próximas semanas.

Con el mes de octubre finalizado, Andalucía ha producido en torno a las 32.000 t de aceite, que supone la mayor aportación a nivel nacional, con un total de 42.000 t recolectadas. Estos datos son reseñables, pues en el mismo mes de la pasada campaña, España solo produjo 7.300 t, también debido al retraso generalizado que sufrió la recolección.

Con respecto a las salidas de aceite al mercado, desde UPA Andalucía destacan que los datos han batido récord al inicio de campaña, con 156.000 t en el mercado interior aparente, incluidas las importaciones (unas 15.000 t). Con estos datos de entradas y salidas de aceite de oliva, las existencias totales a finales de octubre se sitúan en las 641.168 t repartidas de la siguiente manera: 421.300 t en almazaras, 193.769 t en envasadores y refinerías, y 26.000 t en el Patrimonio Comunal Olivarero.

Así, se vislumbra un panorama en el que las salidas de aceite de oliva se mantienen a un ritmo excelente y donde se espera un descenso de la producción para esta campaña en torno al 30%. Además, la Comisión Europea ha aprobado formalmente el almacenamiento privado de aceite de oliva, una medida que el sector lleva tiempo reclamando, a través de la que poder retirar producto del mercado, para equilibrar la oferta y la demanda. Pero, a pesar de todos estos argumentos que, razonablemente, deberían tender a subir el precio del aceite de oliva en origen, nos encontramos con que éste se ha mantenido estable a lo largo de todo el mes. Pero, lo más grave e incomprensible, es que los precios siguen siendo ruinosos y no permiten a los agricultores ni siquiera cubrir los costes de producción.

Por tanto, según UPA Andalucía, “nos seguimos encontrando con una situación intolerables, en la que las comercializadoras no atienden a las leyes del mercado ni a las circunstancias del sector, y continúan perpetuando una especulación en los precios del aceite de oliva que tienen a los agricultores con el agua al cuello”.

Por ello, desde la organización agraria, van a continuar reclamando medidas que frenen la especulación y los desequilibrios, pidiendo a las administraciones que modifiquen la Ley de Cadena Alimentaria, y que prohíban prácticas comerciales desleales como la venta a pérdidas o el uso del aceite como producto reclamo en las grandes superficies de venta. También es necesario que se establezcan contratos tipo con precios mínimos ligados a los costes de producción, entre agricultores y industria.

Así mismo, el sector productor debe concentrar su oferta y tender hacia la manipulación y comercialización del producto, para quedarse con el valor añadido. Pero, para ello, es imprescindible que las institucionales aporten recursos económicos, materiales y humanos, no solo para contribuir a esa concentración, también para la promoción y la apertura de nuevos mercados del aceite, y para la investigación e innovación en el sector.

Fuente: UPA Andalucía