UPA Andalucía seguirá luchando contra los bajos precios para el aceite de oliva

Un mes más, UPA Andalucía ha hecho balance de la evolución de la campaña de aceite de oliva hasta finales de agosto. Teniendo en cuenta unas estimaciones de importaciones de 10.000 t en este último mes, las salidas de aceite se han situado finalmente en las 110.000 t, tras un mes de julio record en el que las salidas alcanzaron las 146.000 t.

Agosto ha sido el mes de menores salidas debido, precisamente, a la menor actividad propia del mes, aunque se espera que las cifras vuelvan a repuntar en septiembre, último mes de campaña, para el que se estima que las salidas ronden nuevamente las 140.000 t, entre las exportaciones y el mercado nacional.

Las existencias totales a 30 de agosto se sitúan en las 884.480 t repartidas entre 641.100 t en almazaras, 210.230 t en envasadores y refinerías, y 33.150 t en el Patrimonio Comunal Olivarero. Son muchos los augurios negativos que apuntan hacia una próxima campaña también truculenta en cotizaciones para el aceite de oliva, tal y como ha sido la campaña que aún está en curso, situación que bajo ningún concepto volverán a consentir desde UPA Andalucía, pero batallarán para evitarlo.

Algunos de estos indicadores negativos son: el previsible enlace que rondará las 740.000 t; el incremento de las producciones en países competidores del arco mediterráneo como Italia, Grecia, Túnez y Portugal; y las esperadas lluvias que han hecho acto de presencia y lo seguirán haciendo en la mayor parte de nuestra comunidad en los próximos días y que, sin duda, favorecerán al cultivo, pero también traerán para el mercado mayores tensiones en los precios. En contraposición, a favor del sector juegan cuestiones como la existencia de un consumo mundial sostenido en más de 3.000.000 t al año y tendente al alza, así como el hecho de que las exportaciones en España siguen batiendo records.

Debido a que la situación crítica que atraviesan los olivareros no ha revertido, desde UPA Andalucía se mantienen en su compromiso de llevar a cabo protestas por los bajos precios en Madrid para la primera quincena de octubre, dando así continuidad a las concentraciones mantenidas en Jaén a finales de mayo, seguidas de la masiva manifestación de Sevilla en el mes de julio.

Con ello, desde la organización agraria apelan no solo a la supervivencia del olivar tradicional, sino también al futuro de nuestros pueblos, a la fijación de la población al territorio y al terrible escenario de despoblación que sufrimos en buena parte de España.

«El objetivo de esta tercera manifestación sigue siendo el mismo: visualizar la crítica situación de los productores, revertir la situación de bajos precios en origen que sufrimos los olivareros, conseguir el equilibrio de los precios por encima de los costes de producción y alcanzar, definitivamente, soluciones globales a un problema estructural», indican desde UPA Andalucía.

En último lugar, desde UPA vuelven a reiterar a las administraciones, por un lado, persistir en medidas como la autorregulación. Por otra parte, buscan seguir avanzando en la mejora de la Ley de Cadena Agroalimentaria, en la lucha contra la venta a pérdidas como una práctica desleal, y que la UE permita algunas excepciones en cuanto a competencia. También es precisa la actualización de los precios para que se active el mecanismo del almacenamiento privado, y que el propio sector se una en estructuras donde se establezcan estrategias que velen por los intereses de los agricultores.

Fuente: UPA Andalucía