Terror en el campo andaluz: lo que da miedo es la sequía

Los embalses andaluces se sitúan al 22% de su capacidad, una tragedia que no vivíamos desde 1995.

Pasada la fiesta de Todos Los Santos, sigue sin llover en Andalucía y sin previsión de que lo haga en las próximas fechas. Y eso sí que es terrorífico para el campo. El miedo es la sequía. Un miedo que en nuestro caso es racional y más que motivado, pues los embalses ya están en nuestra comunidad sólo al 22% de su capacidad, un volumen que no se veía desde 1995.

Con respecto a la misma fecha del año pasado, el descenso es de ocho puntos. A 31 de octubre de 2021 estábamos al 30% y a 31 de octubre de 2022 estamos al 22%. La situación es dramática además de forma generalizada en todos los sistemas. Salvo Guadalfeo, en Granada, todos están afectados por las restricciones: Guadalquivir, Guadalete-Barbate, Axarquía, Campo de Gibraltar, Valle de Almanzora…

El Guadalquivir es la demarcación hidrográfica en peor situación, con los embalses por debajo del 19% (14,7 % en Sistema de Regulación General y 28,11% de otros sistemas de abastecimiento). Como se puede apreciar en la tabla, le sigue Guadalete-Barbate, por debajo del 22%.

Muy significativo es el descenso en un año en la cuenca del Tinto-Odiel-Piedras. Baja 18 puntos, hasta el 35% y se coloca prácticamente en el mismo nivel que la Cuenca del Mediterráneo, donde la situación se mantiene con respecto a 2021, aunque haya sistemas como La Viñuela con niveles por debajo del 10 %.

Fuente: Feragua