Carmen Crespo visita las obras de mejora de caminos rurales en El Ejido incluidas en el Plan Itínere

La consejera Carmen Crespo visita las obras de mejora de caminos rurales en El Ejido

Las actuaciones se llevan a cabo en 4,5 kilómetros de dos vías de comunicación que son básicas para la actividad del sector agrícola

La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, y el alcalde de El Ejido (Almería), Francisco Góngora, han realizado recientemente una visita técnica a las obras de mejora que se están ejecutando en un camino rural de la pedanía de Matagorda, actuación que contempla el acondicionado y pavimentado de esta vía en el marco del Plan Itínere puesto en marcha para la mejora de estas vías de comunicación, básicas para los agricultores y ganaderos de toda la comunidad.

La extensa red de caminos rurales de Andalucía tiene gran protagonismo en el desarrollo agrario en la medida que repercuten directamente en el tiempo de trabajo en las explotaciones y en el acceso a los mercados de los productos. Por tanto, el estado de conservación de esta red tiene una incidencia directa en la rentabilidad y el potencial productivo de las explotaciones. Asimismo, tiene otros efectos públicos imprescindibles, como el de facilitar el tránsito de personas, vehículos y maquinaria, dinamizar el tejido productivo y fijar la población.

En este sentido, la consejera de Agricultura ha informado que esta actuación “responde al interés general del sector agrario, clave para la economía y el empleo de Andalucía y Almería, ya que incide directamente en la competitividad de empresas y explotaciones”.

El camino de El Pichucho C-116, que han visitado la consejera de Agricultura y el alcalde de El Ejido, tiene una longitud de casi 1,7 kilómetros, desde el camino de Las Salinas hasta entroncar con el camino Primer Nivel. Las obras de mejora arrancaron la primera semana de marzo y continúan a buen ritmo.

La actuación supone un coste de 291.000 euros, que sufraga la administración autonómica, y afecta a casi la totalidad de la vía con una parte que será hormigonada y otra que se ejecutará en asfalto. Está considerada como una importante arteria de comunicación del campo porque además de dar acceso a fincas, también se convierten en acceso para pozos y balsas y a la barriada del Pozo de la Tía Manolica

Un camino sobre el que, como ha recordado el alcalde ejidense, “hemos tenido que actuar en numerosas ocasiones por los problemas que se ocasionaban con las lluvias”. “Ahora los agricultores podrán transitar con total seguridad por esta vía”, ha enfatizado.

El camino La Pared C-57 también está incluido en el primer lote de actuaciones adjudicado en el Plan Itínere, cuyas obras permitirán la pavimentación del trazado que se encuentra en tierra, complementándose así un itinerario que irá desde la carretera provincial AL-3303 hasta el camino del Tomillar, con un trazado sobre el que se actuará de 2,8 kilómetros de longitud.

La mejora de este camino tiene un coste de 349.000 euros y da servicio a instalaciones como la cooperativa Indasol, el Pozo-Sondeo de la Comunidad de Regantes San Martín, el semillero Fuente Nueva, las balsas de riego de la Comunidad de Regantes Sol y Arena o los pozos de la Comunidad de Regantes Tierras de Almería, entre otras muchas, además de numerosas fincas e invernaderos. Las obras consistirán en la pavimentación con hormigón armado, la ejecución de cunetas y obras de drenaje longitudinal adecuadas al camino, así como la colocación de señalización horizontal y vertical.

En esta primera fase del Plan Itínere también están incluidas otras dos intervenciones en caminos rurales de los municipios almerienses de Huércal-Overa y Tíjola.

A licitación el contrato para la gestión por diez años de los servicios de control de acceso a los acantilados de Maro-Cerro Gordo en Cantarriján

La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha sacado a licitación el contrato para la gestión de los servicios de control de acceso a los acantilados de Maro-Cerro Gordo desde la playa de Cantarriján, en Almuñécar (Granada), lo que se realiza merced el equipamiento de uso público ubicado en ese espacio.

La concesión se realizará por diez años de duración y con un presupuesto total que se acerca a 1,2 millones de euros. El plazo de presentación de ofertas finaliza mañana martes 3 de mayo a las 12.00 horas.

Gracias a esta concesión se consigue compatibilizar las visitas a este espacio natural de la provincia de Granada con su preservación, facilitando además un ecoturismo sostenible. Se trata de unos acantilados que cada vez son más visitados por la gran belleza de sus paisajes.

La gestión de este equipamiento de uso público supone la puesta en marcha de distintas actuaciones tales como la recepción, información y promoción sobre el espacio natural, lo que permite una aproximación al patrimonio natural y cultural de esta reserva. Igualmente, contempla la restauración o en su defecto el alojamiento de personas asociadas al equipamiento, la dinamización del espacio mediante planes de educación ambiental, la posibilidad de venta de artículos y productos artesanales locales, así como de la Red de Espacios Naturales.

Además, la concesión de este equipamiento de uso público también recoge el control del estacionamiento para evitar problemas de seguridad o la degradación del espacio natural, el transporte de los visitantes a zonas restringidas, o la gestión de las rutas e itinerarios igualmente restringidos.

Maro-Cerro Gordo

Los abruptos acantilados de Maro-Cerro Gordo, que se alternan con pequeñas playas y calas de difícil acceso, ofrecen un fantástico paisaje en el que también se divisan terrazas cultivadas a grandes alturas y que cuelgan de las laderas de la montaña.

Este enclave se extiende desde la torre de vigilancia costera de Maro hasta la cala de Calaiza e incluye una franja marina de un gran valor ecológico. Los senderos, avistamientos de aves y la fauna marina con peces de vivos colores se complementan con otros parajes tales como la Cueva de Nerja, compuesta por distintas galerías con estalactitas, columnas y cascadas, así como importantes yacimientos arqueológicos del paleolítico.

Durante el período estival se pone en marcha un servicio de regulación de accesos a las playas de El Cañuelo (Nerja) y Cantarriján (Almuñécar) mediante vehículos lanzaderas que parten desde sendas zonas de aparcamiento habilitadas al efecto. Esto facilita el control de los accesos a estos entornos.

La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha sacado a licitación el contrato para la gestión de los servicios de control de acceso a los acantilados de Maro-Cerro Gordo desde la playa de Cantarriján, en Almuñécar (Granada), lo que se realiza merced el equipamiento de uso público ubicado en ese espacio. La concesión se realizará por diez años de duración y con un presupuesto total que se acerca a 1,2 millones de euros. El plazo de presentación de ofertas finaliza mañana martes 3 de mayo a las 12.00 horas.

Gracias a esta concesión se consigue compatibilizar las visitas a este espacio natural de la provincia de Granada con su preservación, facilitando además un ecoturismo sostenible. Se trata de unos acantilados que cada vez son más visitados por la gran belleza de sus paisajes.

La gestión de este equipamiento de uso público supone la puesta en marcha de distintas actuaciones tales como la recepción, información y promoción sobre el espacio natural, lo que permite una aproximación al patrimonio natural y cultural de esta reserva. Igualmente, contempla la restauración o en su defecto el alojamiento de personas asociadas al equipamiento, la dinamización del espacio mediante planes de educación ambiental, la posibilidad de venta de artículos y productos artesanales locales, así como de la Red de Espacios Naturales.

Además, la concesión de este equipamiento de uso público también recoge el control del estacionamiento para evitar problemas de seguridad o la degradación del espacio natural, el transporte de los visitantes a zonas restringidas, o la gestión de las rutas e itinerarios igualmente restringidos.

Maro-Cerro Gordo

Los abruptos acantilados de Maro-Cerro Gordo, que se alternan con pequeñas playas y calas de difícil acceso, ofrecen un fantástico paisaje en el que también se divisan terrazas cultivadas a grandes alturas y que cuelgan de las laderas de la montaña.

Este enclave se extiende desde la torre de vigilancia costera de Maro hasta la cala de Calaiza e incluye una franja marina de un gran valor ecológico. Los senderos, avistamientos de aves y la fauna marina con peces de vivos colores se complementan con otros parajes tales como la Cueva de Nerja, compuesta por distintas galerías con estalactitas, columnas y cascadas, así como importantes yacimientos arqueológicos del paleolítico.

Durante el período estival se pone en marcha un servicio de regulación de accesos a las playas de El Cañuelo (Nerja) y Cantarriján (Almuñécar) mediante vehículos lanzaderas que parten desde sendas zonas de aparcamiento habilitadas al efecto. Esto facilita el control de los accesos a estos entornos.

Fuente: Consejería de Agricultura