Asaja Córdoba solicita a la UE y al Gobierno de España la paralización de la reforma de la PAC por poner en riesgo la seguridad alimentaria

El propio comisario de Agricultura, en una reunión con los ministros de la UE, reconoce, por primera vez, lo que Asaja lleva denunciando hace meses: La nueva PAC pone en riesgo la seguridad alimentaria

Asaja Córdoba solicita a la Unión Europea y al Gobierno de España la paralización de la reforma de la PAC por poner en riesgo la seguridad alimentaria, tal y como ha reconocido el comisario de Agriculturade la Unión Europea, Janusz Wojciechowski, quien dijo ayer que “si la seguridad alimentaria está en peligro, entonces tenemos que volver a analizar los objetivos de la estrategia “de la Granja a la Mesa” y corregirlos”, tras una reunión especial con los ministros de la UE a raíz de la crisis de Ucrania.

El presidente de Asaja Córdoba, Ignacio Fernández de Mesa, ha manifestado que “la realidad siempre acaba imponiéndose por más que algunos quieren cambiarla por oscuros intereses y es lamentable que haya tenido que ocurrir la barbarie y el desastre de Ucrania para que se empiecen a abrir los ojos de algunos y se den cuenta de lo es verdaderamente importante”.

Asaja lleva denunciando desde hace mucho tiempo que “con las cosas de comer no se juega”, y esto es lo llevan haciendo desde hace años “muchos iluminados de forma irresponsable”, especialmente en la negociación y tramitación de la nueva reforma de la PAC que entrará en vigor en 2023, si no lo impide el sentido común.

Por ello, Asaja Córdoba pide a todas las instituciones de la UE, Parlamento, Consejo y Comisión, que paralicen la reforma de la PAC y se abra un nuevo debate para analizar las verdaderas necesidades de la sociedad europea en cuanto a tener garantizada de forma propia los alimentos, tanto en cantidad, como en calidad, como en precios razonables para consumidores y agricultores y ganaderos.

También pide Asaja que sea el Gobierno España quien lidere este asunto en la UE a través del ministro de Agricultura, Luis Planas, paralizando la aplicación de la reforma de la PAC en España y escuchar, de una vez por todas, lo que todo el sector le viene diciendo desde hace muchos meses: la nueva PAC que propone es mala para el sector, para la sociedad, para España y para la UE.

Conviene recordar que desde Asaja se ha advertido en numerosas ocasiones que no había estudios oficiales de la UE ni del Ministerio de Agricultura sobre el impacto de la nueva PAC en los consumidores y los agricultores y ganaderos.

INFORME OCULTO

De esta forma, Asaja denunció en agosto de 2021 que se había ocultado el informe realizado por el Centro Común de Investigación (JRC) de la Comisión Europea sobre el impacto de las estrategias «Biodiversidad» y «del Campo a la Mesa”, que son en las que se había basado la Comisión Europea, el Parlamento y los ministros de Agricultura de la UE, para la nueva PAC que acordaron el pasado mes de junio, esperando todos ellos a que hubiera habido un acuerdo político en Bruselas para darlo a conocer.

El informe ratificaba lo que ya indicó el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) en 2020, que el efecto de estas estrategias será una reducción sin precedentes de la capacidad de producción de la UE y de los ingresos de sus agricultores. Destacaba los siguientes aspectos:

  • Cualquiera que sea el escenario considerado, todos los sectores tendrían descensos en la producción de entre el 5% y el 15%, siendo los sectores ganaderos los más afectados.
  • Los cambios en la producción conducirían a una disminución de las posiciones netas de exportación de cereales, carne de cerdo y aves de corral, y a un empeoramiento del déficit comercial de la UE en el caso de las semillas oleaginosas, las frutas y hortalizas y la carne de vacuno, ovino y caprino.
  • Mientras tanto, sea cual sea el escenario, los costes de producción aumentarán alrededor del 10%, con un impacto negativo para la mayoría de los ingresos de los agricultores.

Pero, encima de todo ello, una de las principales conclusiones es que la mayor parte de la posible reducción de las emisiones agrícolas lograda con estas estrategias se verá borrada por el incremento de las emisiones que realicen terceros países para producir lo que no se produzca en la Unión Europea.

Sin embargo, se hizo caso omiso y se aprobó la reforma. “Ahora, la crisis de Ucrania ha abierto los ojos a esta realidad, que no le ha quedado más remedio que reconocer el propio comisario de Agricultura de la UE”, afirma Fernández de Mesa.

Asaja insiste en que, de no paralizarse la nueva PAC, “ésta va a suponer mayores precios y falta de garantía de suministro de alimentos para el conjunto de los consumidores, y menos dinero, más burocracia y más obligaciones para los agricultores”. De este modo, no paralizarla sería una enorme irresponsabilidad de todos aquellos que han negociado la nueva PAC viendo la situación mundial, de lo cual “es y será cómplice y responsable el ministro de Agricultura, Luis Planas”.

A TIEMPO DE RECTIFICAR

Asaja pide nuevamente una nueva PAC que reconozca que el campo produce para alimentar a toda la población con una calidad y seguridad alimentaria contrastadas y a unos precios razonables, que mantiene paisajes y ecosistemas únicos y que, además, es el mejor aliado para el cambio climático, al ser el único sector económico que es sumidero de CO2 y ser la actividad económica que mantiene la población en el medio rural. Por tanto, es la mejor herramienta para luchar contra el despoblamiento.

Asaja exige que “de una vez por todas se abandonen los prejuicios ideológicos, absolutamente trasnochados, faltos de rigor científico, social y económico, y basados en la demagogia y en un inaudito y preocupante desconocimiento de la actividad que se desarrolla en el campo, como quedó patente el mencionado informe de Centro Común de Investigación (JRC) de la Comisión Europea que nos ocultaron a todos los ciudadanos europeos”.

La organización agraria considera que se está a tiempo de rectificar, enfocando la PAC a lo que necesita la sociedad europea: producción de alimentos sostenibles en cantidad y calidad y a precios razonables, conservando los paisajes y el medio ambiente. Eso es lo que hacen y llevan haciendo desde hace años los agricultores y ganaderos. Y es lo que no podrán, de mantenerse la actual propuesta de reforma la PAC.

Fuente: Asaja Córdoba