Los mariscadores de chirla del Golfo de Cádiz podrán capturar 500 toneladas más en 2021-2022

Chirlas gaditanas

En base a los informes científicos elaborados, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha establecido en 2.500 toneladas el volumen máximo de captura de chirla (Chamelea gallina) en el Golfo de Cádiz en la campaña 2021-2022. Este punto de referencia biológico se aplicará tanto para las embarcaciones de draga hidráulica como para las de rastro remolcado.

Por tanto, los mariscadores que faenan en estas aguas podrán capturar, en global, 500 toneladas más que el año pasado. Al respecto, la consejera Carmen Crespo ha alabado “el compromiso con la sostenibilidad ambiental que está mostrando el sector pesquero andaluz” y se ha referido específicamente a los mariscadores de la chirla como ejemplo de “actividad que compatibiliza la conservación del medio natural y la generación de riqueza”.

La responsable de Pesca ha explicado que la decisión del Gobierno regional de ampliar este volumen de pesca se apoya en “la recuperación que está experimentando el caladero del Golfo de Cádiz como resultado de las medidas que están tomando los mariscadores para garantizar su mantenimiento y mejora”.

“El aumento de la población de chirla debe plasmarse también en el incremento de las posibilidades de pesca”, ha apuntado Crespo, que apuesta por “aprovechar los recursos naturales para impulsar la economía andaluza atendiendo siempre, por supuesto, a los principios de sostenibilidad ambiental”.

Para conocer la situación real de la pesquería, el Ejecutivo autonómico ha llevado a cabo un seguimiento científico continuado apoyado por los informes científicos del Instituto Español de Oceanografía (IEO) y la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía (Agapa) y por el propio sector andaluz.

Plan de pesca 2021-2022

Entre otras medidas establecidas por la Consejería para asegurar la conservación del recurso, el plan de pesca de la chirla establece cada año el volumen máximo permitido por embarcación y día. En 2021-2022, cada barco del Golfo de Cádiz podrá capturar, desembarcar y vender en lonja hasta 180 kilogramos de chirla diarios si ha empleado draga hidráulica, y hasta 130 kilogramos si la extracción se ha realizado con rastro remolcado.

“Estas cantidades suponen un incremento considerable respecto a los máximos establecidos por el Gobierno anterior”, ha explicado la responsable de Pesca, en referencia a los límites de 120 kg para las dragas y 90 kg para los rastros que se aplicaban en la campaña 2018-2019.

Por otro lado, la planificación contempla también un tiempo máximo de actividad permitido para ejercer el marisqueo con draga hidráulica, que para esta campaña se ha establecido en cinco horas por jornada de pesca.

Carmen Crespo ha resaltado que “el nuevo plan de gestión de la chirla impulsado por el actual Gobierno andaluz está funcionando” al igual que están demostrando su éxito otras medidas del ámbito pesquero puestas en marcha por su departamento y entre las que se encuentra, por ejemplo, la ampliación de las ayudas que se conceden, tanto a armadores como a tripulantes cuando se realiza un paro biológico.

Con la modificación de las ayudas del Fondo Europeo Marítima y de Pesca (FEMP), este año será posible cobrar subvenciones por tres de los cuatro meses de parada y alcanzar, de esta forma, los 4.500 euros en el caso de los marineros y hasta 20.000 euros para los barcos.

“Estamos cumpliendo con nuestro objetivo, que es responder a las necesidades de los andaluces gobernando no solo para ellos, sino con ellos”, ha afirmado la consejera en referencia al “consenso que siempre busca el Gobierno andaluz”.

Respecto a la chirla, Crespo ha destacado que la situación actual del Golfo de Cádiz está demostrando que “es posible gestionar de otra forma” una pesquería afectada tradicionalmente por “situaciones complicadas” derivadas, por ejemplo, en el caso de las dragas hidráulicas, de su dedicación a una única especie. “Estamos escuchando a los mariscadores y atendiendo sus peticiones de forma responsable y coherente con los recursos disponibles”, ha apostillado.

La Junta inicia los trámites para lograr una Especialidad Tradicional Garantizada para el pulpo seco de Adra

Carmen Crespo anuncia la inminente publicación del primer plan de gestión del pulpo de Andalucía, que permitirá a esta flota artesanal acceder por primera vez a ayudas europeas por paradas

La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha iniciado los trámites ante la Unión Europea para que el pulpo seco de Adra obtenga el sello europeo de calidad ‘Especialidad Tradicional Garantizada’ (ETG). “La obtención de esta denominación será un revulsivo para el turismo y el sector pesquero”, ha afirmado la consejera Carmen Crespo, quien se ha mostrado convencida de que “con el esfuerzo y empuje de todos” este objetivo se convertirá en realidad.

De hecho, el Ayuntamiento de Adra ha elevado a la Junta de Andalucía el proyecto de ‘Valorización y creación de marca de la especialidad gastronómica ‘Pulpo seco de Adra», en el marco de la Estrategia de Desarrollo Local Participativo del Grupo de Acción Local del Sector Pesquero (GALP) del Poniente Almeriense, con el objetivo de continuar los trámites para conseguir este distintivo.

La titular de Pesca ha participado hoy, junto al alcalde de la localidad, Manuel Cortés, en la presentación del vídeo promocional que contribuirá a dar a conocer y a valorar todo el proceso de elaboración del pulpo seco de Adra. “Hay productos ligados estrechamente a la historia y a las tradiciones de los municipios donde se elaboran. Productos únicos, con sabores singulares y de una producción artesanal que dicen mucho de la forma de vivir de sus gentes. En el caso de Adra es el pulpo seco. Un producto ligado a un municipio con unas raíces marineras muy arraigadas y con una flota eminentemente artesanal”, ha recordado Crespo.

La ETG es un sello de calidad a nivel europeo que distingue productos alimenticios que cuentan con rasgos específicos que los diferencian de otros de su misma categoría. Productos, como el pulpo seco de Adra, que se elaboran de modo tradicional y artesanal. La forma de secado y salazón del pulpo seco de Adra es ancestral.

Fenicios y romanos en la antigua Abdera aprovecharon las condiciones singulares de esta tierra para elaborar un producto único. El nivel de humedad, la sal y la brisa del Mediterráneo otorgan, durante el proceso de secado y salazón, una singularidad especial. “Estamos trabajando desde el primer minuto de la mano del Ayuntamiento de Adra para lograr una denominación de calidad diferenciada para este producto tan característico y con tanta significación”, ha destacado Crespo.

La iniciativa parte de la Asociación del Pulpo Seco de Adra (Apusedra) y después de un minucioso trabajo en equipo para llevar ante Europa la petición de este distintivo con el máximo rigor y posibilidad de éxito. Apusedra la constituyen dieciocho socios, entre ellos los principales restaurantes de Adra, pescaderías, la lonja y empresas de transformación.

Las denominaciones de calidad suman un valor de 469 millones

“Esperamos que la ETG Pulpo Seco de Adra se sume a la lista de 68 denominaciones de calidad que existen a día de hoy en Andalucía – DOP, IGP, IG- entre ellas solo 3 ETG (tortas de aceite de Castilleja de la Cuesta, leche certificada de granja y jamón serrano)”, ha afirmado. Según los últimos datos actualizados, las 68 denominaciones de calidad de Andalucía suman un valor económico que supera los 469 millones de euros.

“Podemos afirmar que este distintivo de calidad para el pulpo seco va a suponer un revulsivo para las posibilidades turísticas y gastronómicas de Adra. Un acicate para la economía de la localidad. Pero, sobre todo, una fuente de oxígeno para un sector pesquero asfixiado, que necesita del máximo apoyo y de nuevas oportunidades para salir adelante”, ha dicho.

El Parlamento de Andalucía aprobó por unanimidad en 2018 una proposición no de ley aprobada para que la Junta colabore en la consecución de un distintivo de calidad para el pulpo seco de Adra. “El Ayuntamiento tiene todo el apoyo de la Consejería y ha contado con una subvención a través del Grupo de Acción Local del Sector Pesquero (GALP) Poniente Almeriense para dar pasos hacia delante en el reto común de lograr un distintivo de calidad para el pulpo seco”, ha recordado.

Compromiso con el sector pesquero andaluz

El Gobierno andaluz está comprometido con el sector pesquero y, por supuesto, con la flota del Mediterráneo, “que sigue manteniendo la actividad con mucho tesón y sacrificio, pese a los sucesivos e injustos recortes impuestos por Europa, y a pesar del impacto de la Covid y el cierre del canal Horeca”.

Fruto de ese compromiso, la consejera ha anunciado que durante este mes de julio la Consejería va a sacar el primer plan de gestión del pulpo en Andalucía, que permitirá tanto la recuperación de una especie muy cotizada y demandada en el mercado, a través de paradas biológicas, como el acceso por primera vez de esta parte de la flota pesquera andaluza a las ayudas de los fondos europeos FEMP por paralizaciones temporales de la actividad -en las mismas condiciones que el resto de pescadores de la flota artesanal-.

“El sector pesquero es clave para la recuperación de Andalucía, diversifica la economía de los municipios costeros y de él dependen 23.000 familias andaluzas. La pesca de artes menores es competencia de la Junta y el anterior Gobierno nunca se había preocupado en 40 años por elaborar un plan de gestión del pulpo”, ha recalcado Crespo.

Se podrán beneficiar de las ayudas europeas un total de 529 barcos artesanales de Andalucía: 289 barcos artesanales del Mediterráneo y 240 del Golfo de Cádiz. Las ayudas a los barcos serán de un mínimo de 100 euros/día y las subvenciones a los tripulantes ascenderán al doble del salario mínimo interprofesional; es decir, 1.900 euros/mes o a razón de 50 euros diarios si la parada subvencionada para las ayudas supera el mes. La parada en el Mediterráneo para la especie del pulpo es de 3 meses, desde el 1 de julio al 30 de septiembre y en el Golfo de Cádiz es de dos meses y medio, desde el 15 de agosto al 31 de octubre.

En cualquier caso, se trata de una parada voluntaria, pues el sector puede optar por amarrar el barco y acogerse a las ayudas o bien a dedicarse a la pesca de otras especies y no acogerse a las mismas. Eso sí, no pueden dedicarse al pulpo mientras esté la parada biológica.

Fuente: Consejería de Agricultura