Amigos de la Tierra: «Las negociaciones del clima dejan de lado a la ciudadanía y a la ciencia»

El 15 de diciembre por la mañana finalizaba la cumbre del clima de Madrid, hasta ahora la más larga de las 25, con un acuerdo insuficiente y sin perspectivas de una mejoría de los compromisos de reducción de emisiones. El texto lejos de constituirse como un punto de inflexión para situar la temperatura global del planeta por debajo del 1,5°C, nos aboca a los 3°C, dejando un gran trabajo para la COP26 en Glasgow, y poco tiempo para actuar. 

Una vez más las comunidades del Sur Global son las máximas olvidadas. Amigos de la Tierra recalca que esta cumbre demuestra que la única forma de enfrentarse a la crisis climática es un cambio radical del sistema económico. De esta forma los gobiernos tomarán las decisiones adecuadas, para garantizar que la vida en La Tierra esté por encima de los beneficios empresariales. 

Héctor de Prado, responsable del área de Justicia Climática de Amigos de la Tierra ha lanzado diversos comentarios sobre algunos de los puntos principales de estas negociaciones y de los espacios de la sociedad civil:

“Mejor que no haya acuerdo sobre mercados de carbono, que un mal acuerdo”

Una de las áreas de trabajo donde se esperaba más avances era lo que se conoce como Artículo 6 del Acuerdo París, el que establece un sistema internacional de mercado de carbono. Amigos de la Tierra celebra que las negociaciones sobre el mismo se hayan pospuesto para la COP26, puesto que la intención de la Presidencia de Chile era cerrar un mal acuerdo que habría inundado el sistema con bonos de carbono de acuerdos anteriores, y abierto la puerta al doble conteo y nuevos mecanismos comerciales (mecanismo de desarrollo limpio). Estos mecanismos no harían si no agravar aún más la crisis climática y perjudicar a las comunidades del sur, especialmente las indígenas. Por todo ello, Amigos de la Tierra se opone al artículo 6 y a los mecanismos basados en el mercado.

“Los países ricos se resisten a pagar por su responsabilidad histórica”

Tras esta Cumbre no ha habido avances significativos en materia de financiación climática, ni en lo que se conoce como “Pérdidas y Daños” (impactos que ya ha causado el cambio climático), ni términos de financiación a largo plazo. En el primer caso solamente se ha establecido la formación de un grupo de expertos para desarrollar lo que se conocerá como “Red de Santiago”, cuyo fin supuestamente será catalizar asistencia técnica de organizaciones y expertos a estos países vulnerables, mejorando así su capacidad de respuesta a los efectos del calentamiento.

En el caso del conocido Fondo Verde del Clima, la COP25 de nuevo ha sido completamente ineficaz a la hora de asegurar el dinero comprometido para 2020 (100.000 millones de dólares). En este sentido, la actitud de países como Estados Unidos, ha sido realmente lamentable, evadiendo en todo momento su responsabilidad histórica y capacidad de financiación.

“Hemos alzado una vez una sola voz por la Justicia Climática”

La Marcha por el Clima de Madrid del pasado 6 de diciembre solo puede calificarse como un rotundo éxito y una movilización histórica ciudadana. Casi medio millón de personas venidas de todas las partes de la Península y de todo el mundo alzaron de manera simultánea con la sociedad civil chilena en Santiago de Chile, una única voz por la Justicia Social y Climática. 

En solo tres semanas, la sociedad civil española de la que Amigos de la Tierra participa de forma activa, ha logrado hacer historia convocando la mayor Marcha por el Clima de la historia de España, y una de las mayores a nivel mundial, abriendo asimismo un espacio consagrado a la sociedad civil con decenas de actividades diarias (Cumbre Social por el Clima), y un espacio de convergencia en el centro de la ciudad para acoger colectivos y actividades como formación y talleres de arte.

“De Madrid a Glasgow, un largo y sinuoso camino”

El texto acordado es flojo, especialmente en cuento a la ambición climática. Sabíamos que esta era una “cumbre de transición”, no obstante, en términos generales y a pesar de la duración de la Cumbre (récord en 25 años), los avances han sido escasos. Queda patente una vez más la falta de ambición de las grandes potencias emisoras como Estados Unidos, China, India y demás, y el obstáculo que representan para alcanzar el objetivo comprometido en París hace 4 años. 

A pesar de la buena voluntad del Gobierno español, el persistente bloqueo de diversas áreas de trabajo por parte de los países más contaminantes, nos encamina hacia un futuro muy oscuro. Amigos de la Tierra ha criticado además, que estos países ponen en tela de juicio la validez de la carta de Derechos Humanos en las negociaciones, algo totalmente inadmisible, y considera que Naciones Unidas debería asegurar salvaguardas de este tipo en los textos.

Queda mucho por hacer antes de Glasgow, y Amigos de la Tierra continuará haciendo campaña contra los Mercados de Carbono, y a favor de los Derechos Humanos de las comunidades del mundo que están siendo más devastadas por los impactos del cambio climático.

¡Justicia Climática Ya! ¡Empresas fuera de las negociaciones!

Fuente: Amigos de la Tierra